Los linfocitos CD4 son un tipo de glóbulos blancos que ayudan al sistema inmunológico a combatir infecciones. Los linfocitos CD8 son un tipo de glóbulos blancos que ayudan a destruir células infectadas. Esta prueba se usa para ayudar a diagnosticar y monitorear enfermedades autoinmunes, infecciones crónicas y algunos tipos de cáncer.